¿A qué edad debo llevar a mi hijo al dentista? Las 5 dolencias más comunes

Cada vez es más frecuente que, muchos padres se pregunten cuándo es el momento adecuado para acudir al dentista por primera vez junto a sus hijos.

La primera visita, es realmente importante, así como inculcar unos hábitos de higiene dental y limpieza desde los primeros años de vida, incluso antes de llegar a completarse la dentición total. Por ejemplo, enseñarles a lavarse la lengua de forma correcta, a enjugarse la boca, limpiar las encías, el movimiento correcto de un cepillo de dientes… Eso sí, os recomendamos que les enseñéis a hacerlo de forma divertida (con música, juegos…)  para que el momento de lavarse los dientes, sea uno de los mejores del día.

¿A qué edad debo acudir con mi hijo al odontopediatra?

La recomendación general, es llevar a los niños al dentista tras cumplir un año, o cuando le hayan salido las primeras piezas dentales, aunque lo más usual es que esta primera visita se realice cuando se haya completado la primera dentición. Esto ocurre en torno a los 3 años de edad, cuando ya tienen las 20 piezas. Diversos estudios revelan que, en torno al 25% de los menores de 4 años ya presentan alguna carie, lo que ha ‘obligado’ a adelantar la primera visita al primer año de edad.

El profesional le hará una revisión de dientes y encías, verá si existen caries de biberón, se evaluarán posibles problemas como mordida cruzada, abierta o alteraciones de crecimiento y se iniciará un historial con los antecedentes médicos y dentales del niño. Es el momento de corregir a tiempo malos hábitos e introducir desde temprano buenos hábitos de limpieza. Es importante que este primer contacto no sea breve, para así conseguir esa confianza entre el odontopediatra y el niño.

Tras esta primera revisión, los controles se deben realizar una vez al año.

5 dolencias dentales comunes en los niños

Existen varias enfermedades dentales comunes en los más pequeños que muchas veces se desconocen o se les resta importancia. Se debe tener especial cuidado, ya que si no se tratan desde un principio, pueden ocasionar problemas más graves en el futuro. Entre ellas, destacamos las siguientes:

1. Las caries del biberón

Este tipo de caries afecta tanto a los bebés lactantes como a los que son alimentados mediante biberón. Es un tipo de caries infantil que provoca un proceso destructivo del diente debido a que las bacterias se alimentan de los restos de azúcares que quedan en los dientes o encías, provocando la desmineralización de la superficie dental.

Los dientes de leche afectados por caries se deben tratar lo antes posible, ya que las caries de los dientes de leche afectados pueden afectar la raíz del diente definitivo de forma irreversible.

2. La hipomineralización molar incisiva (MIH)

Es una enfermedad donde la capa externa (esmalte) de los dientes se vuelve blanda y porosa. Esos dientes se vuelven muy frágiles y pueden ser fácilmente atacados por bacterias que causan caries, e incluso pueden llegar a romperse. En la dentición permanente, la MIH siempre se sucede en los primeros molares permanentes y a veces también en incisivos.

3. Traumatismos dentales

Los deportes, los juegos con otros niños o los accidentes domésticos son de las principales causas de aumento de traumatismos dentales en los más pequeños. Lo más común es que se vea afectada la pulpa; corriendo el  riesgo de desarrollar una infección, debemos comprobar si el diente afectado es temporal o permanente, realizaremos una inspección clínica rápida para valorar la extensión de las lesiones y se limpiará con cuidado la zona traumatizada con solución antiséptica. Las acciones a realizar dependen de si el diente está partido o si se ha salido por completo de la boca.

4. Defectos en la estructura dental: maloclusión

El 70-75 % de la población infantil española presenta algún tipo de desviación de la oclusión ideal. Las maloclusiones, son consideraras como factores de riesgo de gingivitis, periodontitis, caries y disfunción de la articulación temporomandibular, aparte de la alteración estética y funcional que conlleva. Es necesario saber valorar la oclusión de forma adecuada y realizar predicciones acertadas, ya que existen diferentes tipos y diferentes tratamientos: maloclusión cruzada, vertical, transversal…

5. Enfermedades de las encías: gingivitis

Si hay una placa bacteriana densa alrededor del diente se puede producir una inflamación, general o localizada de la encía. Los signos son enrojecimiento, sangrado y aliento fétido. Se calcula que más del 50% de los niños mayores de 6 años la experimentarán en algún momento de su vida.

Es realmente importante visitar al odontopediatra con los más pequeños para poder prevenir patologías dentales que en un futuro, pueden ocasionar graves problemas tanto estéticos cómo en la salud general de nuestros hijos.

 

 

 

 

 

 

 

 

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